Ángel Remigia
Hombre honesto, trabajador, amigo de los amigos.
Ángel, cuanto lamento tu partida y más aun que no supe de tu gravedad y enterarme de tu ida me llena de mucha tristeza.
En este momento no sabría como expresar lo que siento al no poder ir a darte el último adiós ya que me entere tarde y no me daba tiempo acompañar a mis amigos que son tu familia.
Ángel sabias de mi aprecio hacia ti y el cariño que te demostraba siempre que nos encontrábamos en cualquier lugar y siempre me saludabas en cualquier cruce de estas calles.
Fuiste un gran padre, esposo, familiar y amigo de todos los jaraguenses, ejemplo de seriedad y solidaridad, trabajador incansable y siempre presente en las actividades culturales, deportivas y sociales de los villeros, colaborador, militar retirado y educador.
“No perdimos a nadie, el que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además lo mejor de él, el amor, sigue en nuestros corazones.
La tristeza ocupa el corazón y la mente de quienes tuvimos la dicha de conocerte y compartir contigo la vida.
Con esta partida la felicidad, ilusiones y esperanzas se truncan. Pero en nuestro corazón permanecerá siempre como paradigma de comprensión, nobleza y fortaleza".
Dejas un enorme vacío a la comunidad villera.
Solo me resta pedirle al Todopoderoso que derrame sobre tus familiares el don de la resignación y la conformidad que encuentren refugio en cada uno de tus recuerdos.
Ángel Méndez
Paz a tus restos
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